El día martes, finalmente se conoció, luego de tantas idas y vueltas, la habilitación para la candidatura de Marcelo Tinelli como presidentes de la Asociación del Fútbol Argentino, en un acto de total justicia, sobre todo por lo hecho durante estos últimos años al frente de San Lorenzo, institución en la que venía trabajando y de la que es vicepresidente.
La mayor controvercia, radicaba en la interpretación del artículo 50 del reglamento de AFA que indicaba que un dirigente para poder postularse a la presidencia de la entidad, tenía que tener un mínimo de 4 años
Sin embargo, la decisión de habilitar al conductor televisivo, fue durante la reunión del comité ejecutivo y se dio por unanimidad, entre los 44 integrantes de dicho órgano perteneciente a la AFA.
Dentro de la misma, y como consecuencia de esto, también se dio la posibilidad a cualquier dirigente, independientemente de la antiguedad que tenga, a poder postularse, sin ningún tipo de problemas, y con sólo presentar su propuesta.
Entre los habilitados, se encuentran Hugo Moyano, Presidente de Independiente, que asumió en su cargo en este año, a principios de año, y el otro es Juan Sebastián Veron, por Estudiantes, que tampoco hace tanto que está, como los dos más destacados.
Acá encontramos dos aspectos fundamentales que se evidenciaron muy fácilmente; por un lado, los intereses políticos, de quienes formaron parte, a tal punto que hubo fuertes acusaciones tanto de un lado como del otro
Por el lado de los opositores, decían que Tinelli presionaba a quienes estaban a su favor, para que lo votaran, en tanto que desde el otro sector le retrucaban con la acusación de que si no votaban como ellos querían podían llegar a perder sponsors.
Otro punto más que se trató en la misma reunión, fue la modificación del torneo para Junio del año que viene, en donde habrá un torneo corto, de 30 equipos, divididos en dos zonas de 15, y un solo descenso con un solo ascenso, algo que debió haberse hecho de entrada y antes.
Además, se creó una vicepresidencia tercera, que estará ocupada por el propio Tinelli, como parte de la transición a las futuras elecciones que se pasaron del 25 de octubre, al 1 de marzo de 2016, para no superponerlas con las elecciones generales.
En definitiva una vez más dejaron de lado lo reglamentario, y se centraron en lo que cada uno piensa, en acordar - según la letra fría de la norma, Tinelli no hubiera podido cumplir con el requisito de los 4 años- por priorizar lo que a ellos les importa, en lugar de pensar en el beneficio de la AFA.
Esperemos tener que aguantar esto por poco tiempo más, ya que le hace muy mal a todo el fútbol argentino.